Revista Proyección Social

ISSN 1657 - 6799


Revista de Proyeccion Social

Enero-Diciembre 2016; 1(1): 10-14

Informe de Proyección Social


LA PROYECCIÓN O EXTENSIÓN UNIVERSITARIA, UN RETO PARA LA INVESTIGACIÓN SOCIAL


Rolando Centeno Tapiero1



Resumen


El presente documento contiene una valoración del resultado de una experiencia de formación para los semilleros de investigación de la Facultad de Economía y Administración de la Universidad Surcolombiana. Allí se exponen cada uno de los momentos en los cuales las discusiones desde los estudiantes, tuvieron eco en una oportuna reflexión que fuera pertinente para compartirla. La primera parte hace referencia a la experiencia puntual del espacio de formación. Conjugando los momentos de desarrollo que implica investigar, así como la relación que guarda con la vida, asumiendo el conocimiento y la producción de este como una experiencia de conquista afectiva, asimilando cada etapa y fase metodológica, como un momento de placer y cuestionamiento que nos orienta en la cotidianidad. Posteriormente ubicamos algunos cuestionamientos que permita valorar el momento actual de la relación investigación – proyección social. A manera de interrogantes se formulan algunos momentos e inquietudes que derivados del accionar misional de la universidad. En ese sentido, se plantea la necesidad de abordar la Investigación Acción Participativa (IAP) como metodología oportuna para comprender un poco más los retos de la proyección social desde las universidades. Finalmente se aportan reflexiones finales como resultado de la experiencia. Elementos centrales allí, que sugieren la revisión del modelo pedagógico orientado desde la dirección central de la Universidad. Seguidamente, se hace hincapié en la estructura de funcionamiento que pueda estar integrado por los estamentos universitarios.
Palabras clave: Extensión universitaria, investigación social, formación.


Abstract


The present document contains an assessment of the results of a training experience for the research seedlings of the Faculty of Economics and Administration of the Surcolombian University. There they present each of the moments in which the discussions from the students, echoed in a timely reflection that was pertinent to share it. The first part refers to the punctual experience of the training space. Combining the moments of development that involves research, as well as the relationship that keeps with life, assuming the knowledge and production of this as an experience of affective conquest, assimilating each stage and methodological phase, as a moment of pleasure and questioning that Orients in everyday life. Subsequently we locate some questions that allow us to evaluate the current moment of the research - social projection relationship. Some questions and concerns arising from the missionary action of the university are formulated as questions. In that sense, the need to address Participatory Action Research (IAP) is proposed as a timely methodology to understand a little more the challenges of social projection from universities. Finally, final reflections are brought as a result of the experience. Central elements there, which suggest the revision of the pedagogical model oriented from the central direction of the University. Next, it emphasizes the structure of operation that can be integrated by the university estates.
Keywords: University extension, social research, formation.



Recibido: 10/09/2016 Aceptado: 16/11/2016





1 Administrador de Empresas, Grupo de Investigación Crea. Candidato a Magister en Pensamiento Estratégico y Prospectiva, Universidad Externado de Colombia.





Lo acontecido en una experiencia de formación


Finalizando el año 2013, se dispuso un espacio para el fortalecimiento de la investigación con perspectiva de ligar la proyección social y el conocimiento, hacia una reflexión más pertinente con el estamento estudiantil.


Fueron los semilleros de investigación quienes aportaron la discusión y la disposición de comprender la necesidad y el dialogo oportuno en tal espacio. Estudiantes de Administración, Contaduría y Economía, participaron en cada una de las sesiones programadas y en las cuales, permitían abordar las temáticas desde el conocimiento; pero a la vez, que desembocara en una reflexión más crítica en el ámbito interno de la unidad académica y que a partir de allí, se ubicara el rol de la investigación con las demandas y requerimientos que la región y el contexto así lo solicita.


El descubrir y mirar más allá de la mera realidad fue el elemento central que permitió el inicio del espacio de reflexión. En cada uno de las sesiones, siempre era importante atar las opiniones con un momento propio de la vida; suscitando así, el dialogo entre academia, entorno y la necesidad de apropiarlo desde el ámbito personal. Dicha referencia fue la temática de la primera sesión; es decir, el desarrollo y cohesión existente entre conocimiento, Universidad y Sociedad.


En un segundo momento, se encuentra el desarrollo del cómo. Se expone todo el proceso de investigación, respecto a la metodología y qué significa investigar bajo los paradigmas existentes, con los respectivos enfoques y demás fases y etapas correspondientes. Es llegar a plantear, los problemas cotidianos del conocimiento, pero más aún, disponerse para armar el andamiaje de la vida, para colegir cada situación como un nuevo amor; queriendo decir ello, que un proceso metodológico para preguntarse por algo, sugiere, y tal vez sea el equivalente, de pensarse la estrategia y la táctica de una conquista amorosa.


Llega un momento especial, que denota lo que vivo en el conocimiento y cómo lo traspalo a la vida con los demás, aquí llegamos al escenario de la investigación social. Las discusiones y aportes, revitalizaron la mirada que se debe tener en proporción a la utilidad del conocimiento y del cómo construye soluciones a las problemáticas regionales y locales. Ello deriva en una situación la cual nos cita a pensarnos de manera


colectiva, la investigación no pertenece a los centros académicos, dichos resultados deberán tener un impacto en las comunidades, en los sectores productivos, en los grupos de interés que así lo reclamen; no son ajenos los problemas sociales, cuando se habla de promover el espíritu investigativo en la comunidad académica, por lo tanto, pensar en investigación es pensar el futuro de la región y el país, pensar en investigación, es contemplar la búsqueda incansable de superar los problemas sociales...es revisar cómo la conquista amorosa desde el aporte de mis sentimientos, provoca una mejor vida en la otra persona.


Posteriormente buscamos el método más apropiado, reunir la información suficiente para los propósitos que he trazado. La definición de la metodología, nos ha colaborado bastante; entendido esto, los estudiantes reconocen bajo que paradigma están sujetas las iniciativas de investigación que cada quien expone. Llegaba entonces el momento de recolectar la información que requiero, ello solo es válido en el sentido de encontrar cualidades, defectos, pero también, qué cantidad de variables poseo en el objeto de estudio. Es conocer todo acerca de esa persona que en este momento me atrae ¿qué nombre tiene? ¿Cuáles son sus gustos?, ¿es romántica? ¿Ya comparte con otra persona? ¿Qué piensa de la vida?... en fin.


Culminamos con una puesta en escena de las iniciativas. Compartimos cuáles son nuestros propósitos como investigadores y cuando la vamos a iniciar, ello sería orientado por una guía de tiempos y recursos; ¿qué necesito para mi investigación, cuánto vale y cuando lo termino...dicha conquista será pronto o durará una eternidad?


Sobre las políticas y la proyección social...un reto por asumir


Las realidades de los centros de educación superior, están sujetas a dinámicas inmersas en ámbitos relativos a la formación, generación de conocimiento y relación con la esfera socio cultural. Desligar estos tres elementos, constituye un desagravio contra el devenir y esencia de las universidades; queriendo decir ello, que valorar actualmente la posibilidad de materializar estos ejes misionales, es un reto mayor para las universidades y más aún para la universidad Surcolombiana.


Luego de 40 años de existencia, se percibe que la tarea se ha realizado con grandes intensiones, pero con poco desarrollo y compromiso. Se evidencia un marco institucional y normativo, pero casi desconocido para la comunidad universitaria; estamentos que involucran solo el lineamiento de formación, pero con distancias evidentes y baja cohesión con el campo de la extensión o proyección social. Esto motivado por la lógica de la profesionalización abierta y sin criterio, de cobertura desmedida, sin pertinencia con su entorno y desarrollo social, no queriendo decir ello que todo esté perdido, solo es una reflexión que nos permita orientar una mirada de mayor realidad a las demandas que la región así lo suscita.


Iniciemos por identificar algunos parámetros claves e importantes que reza el marco general. Siendo estos, direccionadores que deben asumir con mayor hincapié, desde las perspectivas de horizonte organizativo para el centro de estudio; estamos refiriéndonos a los enfoques misionales, las políticas y los propósitos que tiene la proyección social. Observando la parte motiva del que hacer para realizar el aspecto misional, este se refiere a una formación integral, mediante la producción, aplicación y difusión del conocimiento científico, humanístico, artístico y cultural, con espíritu crítico, que aborde eficazmente los problemas relevantes de la región. Contiene lo que implica el vínculo con la sociedad y sus dimensiones referidas a las estructuras sociales y de poder; es por ello, que la dirección estratégica y corporativa de la institución, debe repensar su quehacer en relación a las acciones, las estrategias y las necesidades de una reflexión más primaria con el estamento estudiantil. Hoy presentamos una universidad solo como eje de formación pero desligada de su entorno, si bien adelantamos programas, directrices desde las unidades académicas, convenios etc. Para asumir un simple indicador, es más aun importante el diseño de acciones con pertinencia social en el entramado de la formación integral


Revisando con mayor profundidad, encontramos la proyección social como un proyecto académico. Expresa una relación con criterios de calidad para la docencia y la investigación, situación que desemboca en ambigüedades por situaciones de falta de claridad en la guía pedagógica, con la cual debe estar acompañada la proyección social. Son ánimos importantes que decantan acciones relevantes para la institución; sin embargo, no es suficiente para el enfoque que permita una mayor incidencia, que desde el aula de clase y la relación con el componente socio cultural, proporcione las estrategias idóneas para las actuaciones que pueda tener la Universidad con la región.


En esa perspectiva, surgieron discusiones, diálogos y demás acotaciones con los estudiantes en el espacio de formación. Fue un recuentro depropósitos, fundamentados por la mirada propia, pero que facilitara una reflexión oportuna desde el ser y saber colectivo, para el revisar la incidencia de la universidad con su contexto. Allí encontramos que una tarea principal que debe ocuparse la Surcolombiana, es el ser actor fundamental de la transformación de los ámbitos sociales, no queriendo decir ello, que es responsabilidad exclusiva de la casa de estudios, sino, en el horizonte de articulación y promoción de estudiantes con sentido social y compromiso de aportar al desarrollo integral como profesionales.


La Investigación Acción participativa (IAP) como base fundamental de la proyección social.


Son diversas y múltiples las metodologías empleadas desde las universidades, para intentar el desarrollo de la extensión conforme a los requerimientos institucionales. Desde enfoques cualitativos y cuantitativos, que pasan por ordenar de una manera muy formal el conocimiento y que en ocasiones, se obvian las realidades conforme la sociedad los muestra; dejando ver así, algunas decisiones que en su momento son acertadas para el ejercicio de gestión, pero que carecen de un soporte para el contexto apropiado.


Bajo esa mirada, las ciencias sociales a partir de los últimos 30 años, han realizado ingentes aportes para entender la relación universidad sociedad y el rol que estas últimas deban asumir en situaciones especiales y concretas. Se hace referencia a la Investigación Acción Participativa, como una metodología que ubica de manera considerable, el fundamento del investigador como guía y conductor de procesos de transformación social, bajo las miradas de un contexto que se pude transformar.


Diferentes teóricos de América Latina, prestaron mayor atención a las bases que constituyeron la educación popular y en relación a la generación del conocimiento en una perspectiva de cambio social. Si bien este movimiento surgió simultáneamente en diferentes países del continente desde realidades y contextos institucionales variados; actores, discursos y prácticas coincidieron en su posición crítica hacia el sistema social de la época en su opción por la transformación y por los grupos que sufrían las consecuencias de un orden social desigual e injusto; pero insertándose en sus realidades para establecer un diálogo entre el saber académico y la sabiduría popular.


Dos ejes atraviesan esta corriente de pensamiento latinoamericano que se fue perfilando entre dictaduras, exilios, políticas desarrollistas y movimientos de renovación en la iglesia católica. Por un lado, un eje de carácter epistémico según el cual en todos estos procesos debía generarse conocimiento, pero en una perspectiva crítica, reconociendo que la producción de conocimiento no es neutral, siempre responde a la situación y a los intereses de los sujetos que lo producen desde su base social; por ello, Orlando Fals Borda sugiere que “es necesario descubrir esa base para entender los vínculos que existen entre el desarrollo del pensamiento científico, el contexto cultural y la estructura de poder de la sociedad”


El otro es el eje de la acción, tal como lo indica Orlando Fals Borda cuando prefiere la sigla IAP, en lugar de IP (Investigación participativa), porque es “preferible... especificar el componente de la acción, puesto que deseamos hacer comprender que se trata de una investigación-acción que es participativa y una investigación que se funde con la acción (para transformar la realidad)” “Fundirse” con la acción supone un compromiso para aquellos que se embarcan en esta aventura en la que se va moldeando una “filosofía de la vida” desde un conocimiento vivencial. “Recordemos que la IAP, a la vez que hace hincapié en una rigurosa búsqueda de conocimientos, es un proceso abierto de vida y de trabajo, una vivencia, una progresiva evolución hacia una transformación total y estructural de la sociedad y de la cultura con objetivos sucesivos y parcialmente coincidentes.


Desde estas dos tensiones se genera una tercera: cómo hacer una ciencia rigurosa en espacios no universitarios en la cual lo cualitativo aporte tanto como pueden hacerlo las técnicas cuantitativas, y el sentimiento enriquezca lo que aporta la razón, como “practicantes sentipensantes”. Por otra parte, no es fácil llevar a cabo este proyecto cuando los procesos son “cooptados” por instituciones que no están orientadas a promover profundos cambios sociales y sólo les interesa la metodología por su carácter participativo desinteresándose por las finalidades y las apuestas de cambio estructural. Sin embargo, Fals Borda no niega la posibilidad de que las universidades puedan participar de forma directa en la resolución de problemas concretos de la sociedad, pero eso supone, según este investigador colombiano, pasar del concepto de “extensión universitaria” al de “universidad participante”: “la educación debe hacerse no pensando en la academia sino en el mundo, en la vida, en el contexto. Es educar en los problemas reales, lo cual obliga a transformar las facultades y departamentos y a hacer estructuras con base en problemas sociales y contextos culturales y no con base en problemas formales de la institución. Esto implica para el investigador en el campo educativo dirigir su mirada a las aulas de clase y a los centros para convertirse en un acompañante del docente que promueve la observación y reflexión de la práctica para generar su transformación y el avance teórico en esta área5


Bajo esa perspectiva, el marco institucional de las universidades y más aún las públicas, tiene el reto de asumir la IAP, como una metodología guía para la construcción del diseño que convoque una proyección social pertinente para los cambios requeridos del contexto.


Para la reflexión final


Es más que importante hacer las valoraciones finales que puedan ser clave para ligar el conocimiento con la proyección social y la formación integral desde la Facultad de Economía y Administración y la Universidad Surcolombiana.


En principio es urgente revisar el enfoque pedagógico que tiene la unidad académica desde la facultad y la pertinencia con su componente socio cultural. Es decir, es necesario evaluar el modelo pedagógico que actualmente rige el currículo de la universidad y partir de allí, realizar los ajustes necesarios a los planes de estudio, ello implica derivar interrogantes que ubiquen la proyección social desde un campo de construir escenarios conforme la realidad propia; allí la Investigación Acción Participativa, deberá ser un elemento central para la confluencia de componentes básicos, complementarios y flexibles, los cuales aborden estrategias de aula con prácticas sociales que desarrollen conocimiento propio desde una realidad especifica.


En un segundo momento, las reflexiones y gestiones, estarán concentradas en la estructura básica de funcionamiento de la investigación y proyección social. Nos referimos aquí, a las estrategias que involucren la comunidad académica; queriendo decir ello, que el cuerpo docente y el estamento estudiantil, concreten expresiones o grupos de conocimiento ligados totalmente a las necesidades de la región; dicha reflexión se orienta a entender, que la investigación debe estar sujeta a las necesidades y problemáticas que tenga el contexto propiamente dicho, no es investigar por investigar, es generar nuevos saberes siendo consciente de su realidad y del cómo transformamos dicha realidad, de acuerdo a un escenario más oportuno de convivencia para la comunidad académica y la región.


Bibliografía


Acuerdo 046 de 2004. Estatuto Básico de ProyecciónSocial. Universidad Surcolombiana.

ORTIZ, Borjas Beatriz Marielsa, La Investigación Acción Participativa: aporte de Fals Borda a la educación popular Espacio Abierto, vol. 17, núm. 4, octubre-diciembre, 2008, pp. 615-627, Universidad del Zulia Venezuela.

FALS BORDA, “La ciencia y el pueblo: nuevas reflexiones”. La Investigación Acción Participativa. Inicios y desarrollos. Consejo de educación de adultos en América Latina. Universidad nacional de Colombia. 1980

RAHMAN, A FALS BORDA, ORLANDO. La situación actual y las perspectivas de la IAP en el mundo. Consejo de Educación de adultos en América latina. Universidad Nacional de Colombia Pág. 213. 1989.