Revista Paideia Surcolombiana

ISSN 0124 - 0307 | e-ISSN 2538 - 9572



Artículo de Reflexión

Recibido: 18 marzo de 2020 / Aceptado: 24 julio de 2020

Inclusión de la comunidad inga a dos mestizos

Inclusion of two mestizos in the inga community

Inclusão da comunidade Inga a dois mestiços



Yhisela Gómez Espinosa

Magíster en Educación para la Inclusión

Universidad Surcolombiana

yg1407@gmail.com


Javier Salas Ramírez

Magíster en Educación para la Inclusión

Universidad Surcolombiana

javiersalas1608@hotmail.com


Julián Vanegas López

Magíster en Conflicto, Territorio y Cultura

Universidad Surcolombiana

julianalberto69hotmail.com



Resumen


Desde una mirada intercultural, este estudio se enfoca en analizar la inclu- sión realizada por la comunidad indígena inga ubicada en Colón, Putumayo, a dos mestizos, utilizando un enfoque metodológico cualitativo, con diseño etnográfico, se rescatan las voces de la comunidad para identificar tendencias en cuanto a la dimensión, de inclusión cultural que se a lo que se ha cultivado entre personas, que cognitivamente se comparte y se traduce en usos y costumbres, lenguas, creencias y formas de vida; la inclusión social que apunta a la reducción de las desigualdades entre las personas, la inclusión económica como una concepción solidaria en oposición al capitalismo y, la Inclusión política, como forma de participación que aspira a fortalecer sus organizaciones y a tener un rol más activo en la construcción de la democracia y de estados de carácter multiétnicos, pluriculturales y multilingüe.


El estudio destaca el buen vivir - Suma Kiusai, que transversaliza las cuatro dimensiones de inclusión de la comunidad indígena a los mestizos; también se destaca la apropiación del territorio, la política desde la integración y la inclusión, el valor simbólico de la Chagra para generar tejido y compartir alimentos.


Palabras clave: Inclusión, Ingas, indígenas, mestizos.


Abstract


From an intercultural perspective, this study focuses on analyzing the inclusion carried out by the Inga indigenous community located in Colón, Putumayo; to 2 mestizos by using a qualitative methodological approach, with ethnographic design, the voices of the community are rescued to identify trends in terms of the dimension of cultural inclusion, which is what has been cultivated among people, which is cognitively shared and translated into uses and customs, languages, beliefs, and lifestyles; Social inclusion points at the reduction of inequalities between people, economic inclusion as a concept of solidarity in opposition to capitalism, and, political inclusion, as a form of participation that aims at strengthening their organizations and playing a more active role in the construction of democracy and multi-ethnic, pluricultural and multilingual states.


This study highlights the good living - Suma Kiusai, which transversals the four dimensions of inclusion of the indigenous community to the mestizos; it also highlights the appropriation of the territory, politics from integration and inclusion, the symbolic value of the Chagra to generate fabric and share food.


Keywords: Inclusion, Ingas, indigenous people, mestizo.


Resumo


Numa perspectiva intercultural, este estudo centra-se na análise da inclusão feita pela Comunidade Indígena Inga situada em Colón - Putumayo a dois mestiços, com uma abordagem metodológica qualitativa, com um desenho etnográfico, se resgatam as vozes da comunidade para identificar tendências em termos da dimensão da inclusão cultural que se relaciona com o que foi cultivado entre as pessoas, que é cognitivamente compartilhado e traduzido em usos e costumes, línguas, crenças e modos de vida; inclusão social que visa a redução das desigualdades entre as pessoas, a inclusão econômica como uma concepção de solidariedade em oposição ao capitalis- mo e inclusão política, como forma de participação que visa fortalecer suas organizações e ter um papel mais ativo na construção da democracia e de Estados multiétnicos, pluriculturais e multilíngues.


O estudo destaca o bem viver - Suma Kiusai, que atravessa as quatro dimensões da inclusão da comunidade indígena aos mestiços; destaca também a apropriação do território, as políticas de integração e inclusão, o valor simbólico da Chagra para gerar tecidos e compartilhar alimentos.


Palavras-chave: Inclusão, Ingas, indígenas, mestiços.



Introducción


Teniendo en cuenta que en los últimos años se viene hablando de la inclusión y el respeto de la diversidad, nace la idea de comprender los procesos de inclusión acerca de la diversidad en los entornos que se pueda manifestar: social, cultural, político, religioso, educativo, raza, genero entre otros, con cual se quiere vivir en paz y armonía, queriendo así una sociedad con igualdad, equidad y justicia como principio y fundamento en el rol de cada ciudadano colombiano.


De acuerdo con la revisión de trabajos existentes a nivel internacional, nacional y local, que fortalecen la investigación en sus aportes de tipo metodológico. Entre estos se resalta la investigación “Inclusión educativa de los niños de diferentes etnias ecuatorianas en la escuela Ciudad de Esmeraldas de la ciudad de Guayaquil”, cuyo objetivo fue analizar la importancia de la inclusión de los niños de diferentes etnias en el sistema educativo regular para fomentar la igualdad en la escuela Ciudad Esmeraldas (Moscol, 2014).


La investigación “Schematic representations of ethnic minorities in young university students” (“Representaciones esquemáticas de las minorías étnicas en los jóvenes universitarios”), realizada por Alvídrez, Igartua y Martínez-Rosón (2015), se enfocó en el análisis de las representaciones cognitivas sobre minorías étnicas en una muestra de jóvenes universitarios españoles.


Dentro de las investigaciones nacionales se recalca inicialmente el estudio realizado por Capera y Torres (2014): “Sentido y prácticas frente a la relación familia-escuela en comunidades indígenas étnias: Nasa de Cajibio-Cauca y Pijao de Coyaima-Tolima”. Su objetivo era comprender los sentidos y prácticas en la relación familia-escuela en las comunidades étnicas.


A nivel local, incide la investigación titulada “Significado que tienen los estudiantes mestizos frente a su vinculación a la educación indígena”, cuyo objetivo general era comprender el significado que tienen los estudiantes mestizos de los grados 8,9,10 y 11 frente a su vinculación a la educación indígena de la Institución Educativa Kue Dsi’j del resguardo indígena Huila, inspección de Río Negro, municipio de Íquira, departamento del Huila, en el año 2014 (Pacho, Embus, Tovar y Embus, 2014).


Con las anteriores investigaciones se evidencia el interés por investigar las comunidades indígenas, tomando de ellas su experiencia y resultados como base al momento de realizarse la fase inicial de esta investigación.


Cabe resaltar que Colombia es un país con contextos diversos y con una amplia diversidad sociocultural en toda la extensión de su territorio, en donde “el Estado reconoce y protege la diversidad étnica y cultural de la nación colombiana” (Congreso, 1991, pág. 14), como lo cita el artículo 7º de la Constitución Nacional Colombina de 1991. Exponiendo lo anterior, se llegó a una comunidad que está ubicada en el sur del país exactamente en los municipios de Colón, en el departamento de Putumayo, donde se encuentra asentada la mayor población nativa Inga, que aún conserva y transmite su lengua a sus descendientes. Esta es participe de una relación intercultural, a través de la historia, con la comunidad Kamëntsa e Inga, que aprendieron a convivir en armonía y compartir el mismo territorio, dando ejemplo de respeto a la diversidad en todos los entornos de una sociedad. Esta es una comunidad intercultural que se puede definir como aquella que “va más que de las relaciones entre culturas. Supone el reconocimiento del “otro” y la afirmación de sí mismo” (Moya, 2009, pág. 29). Por tal motivo surgió la motivación de conocer cómo la comunidad indígena Inga realizan la inclusión desde su perspectiva y cosmovisión, teniendo en cuenta los derechos de distintividad como sinónimo del derecho a la diferencia. Esto expone la importancia de conocer cómo realizan la inclusión la comunidad indígena Inga a dos mestizos, “siendo uno de los pueblos que ha desarrollado procesos de interculturalidad con otras comunidades indígenas” (La Agencia de la ONU para Refugiados, 2011, pág. 15). Lo anterior permite que se comprenda cómo esta cultura vivencia en su cotidianidad la inclusión desde la perspectiva de la cosmovisión y el respeto de sus creencias ancestrales hacia otras personas que no pertenecen a su comunidad e identidad cultural.


A partir de ese saber y cosmovisión de vida se quiso conocer los procesos de inclusión desde la sabiduría indígena que realiza el pueblo Inga, como una herramienta de investigación necesaria que se debe dar a conocer en el campo investigativo. Teniendo en cuenta lo expuesto, se plantea el siguiente interrogante: ¿Cómo realizan la inclusión a dos mestizos en la comunidad indígena Inga ubicados en Colón– Putumayo?


Establecimiento del problema


El saber indígena es un saber dinámico que se recrea a diario a través del que hacer del hombre en relación con lo divino, la naturaleza, con la familia, la comunidad y la sociedad en general. Es decir, los saberes indígenas siempre han constituido una riqueza intelectual para formar Hombres comunitarios con identidad, semejante a decir formar ciudadanos, tarea principal encomendada en cabeza de los ancianos sabedores. (Jamioy, 1997,pág. 66)


A partir de ese saber y cosmovisión de vida se quiso conocer los procesos de inclusión desde la sabiduría indígena que realiza el pueblo Inga, como una herramienta de investigación necesaria que se debe dar a conocer en el campo investigativo. Por ello fue importante y relevante conocer desde la etnografía los procesos de inclusión que se dieron a partir de la sabiduría indígena Inga, ya que como hizo referencia De La Cruz (citado por Martínez, 1998) para llegar al punto que no conoces debes tomar un camino que tampoco conoces. Teniendo en cuenta lo anterior, se plantea el siguiente interrogante: ¿Cómo realizan la inclusión a dos mestizos en la comunidad indígena Inga ubicados en Colón, Putumayo?


Metodología


La presente investigación centró su interés en cómo realizan la inclusión a dos mestizos en la comunidad indígena Inga, utilizando un enfoque metodológico cualitativo en donde se tomaron las narraciones de los líderes indígenas a través de la entrevista semi-estructurada, diario de campo y observación participante, utilizándose “para que el investiga- dor se forme creencias propias sobre el fenómeno estudiado, como los sería un grupo de personas únicas o un proceso particular” (Hernández, Fernández, y Baptista, 2014).


Para el desarrollo del estudio dentro del enfoque cualitativo, se empleó el diseño etnográfico teniendo como propósito, según Caines y Álvarez-Gayou (citado por Hernández, Fernández, y Baptista, 2014), describir y analizar lo que las personas de un sitio, estrato o contexto determinado hacen usualmente (se analiza a los participantes en “acción”), así como los significados que le dan a ese comportamiento realizado en circunstancias comunes o especiales. Finalmente, presenta los resultados de manera que se resalten las regularidades que implica un proceso cultural.


Los sujetos de estudio para esta investigación lo construyeron los indígenas Inga ubicados en Colón, Putumayo. Donde previamente se realiza un viaje para los respectivos premisos del cabildo y gobernador de la comunidad indígena.


Las técnicas e instrumentos que se utilizaron fueron la observación participante, entrevista semi-estructurada, diario de campo. Que se emplearon durante la estadía de un mes de los 2 mestizos que ingresaron a campo en enero del 2017. Seguido de ello en el mes agosto del mismo año se hace la última visita de 7 días para la recolección de datos faltantes.


Mirada teórica


Inclusión cultural


La cultura engloba un conjunto de procesos sociales que incluye, como diría García (2005), “el conjunto de los procesos sociales de significación, o, de un modo más complejo, la cultura abarca el conjunto de procesos sociales de producción, circulación y consumo de la significación en la vida social” (pág. 33). Por tal razón, Manrique, Benjumea, Rodríguez, Nieto, Calvo, Botero y Salamanca (2003) afirman que


la cultura es un término que se refiere a lo que se ha cultivado entre personas, que cognitivamente se comparte y se traduce en usos y costumbres, lenguas, creencias y formas de vida. La cultura le define a una persona distancias apropiadas entre personas o con carros en movimiento; tamaños apropiados para partir un vegetal que va a cocinarse; qué hacer con la placenta, quien le pone nombre a un niño, porque el robo es un delito, etc. La cultura es algo que se tiene como propio. (pág. 11)


Inclusión social


La inclusión social se ha centrado en la atención de las casusas y factores de desigualdad socioeconómico, buscando alternativas para combatir este fenómeno social logrando dar un mejor uso a los recursos económicos del Estado y beneficios sociales a los sectores menos favorecidos (Azuero, 2011). Según lo anterior, Lloréns (2006) define la inclusión social como “un proceso amplio que incluye no solo la participación socioeconómica y política, sino también la participación cultural más amplia y plena de la población” (pág. 2).


La inclusión social surge como un proceso esencial por su aporte a la equidad y a la estabilidad, además de ser económicamente útil puesto que el recurso humano educado, capacitado y bien dotado mejora la capacidad productiva del país e incrementa la demanda agregada interna. (Araoz, 2010, pág. 5)


El proceso consiste en incluir a los excluidos, para que participen pasiva y activamente mediante una ampliación indefinida de la ciudadanía hacia una sociedad en la cual los derechos sociales, económicos y culturales sean aceptados y de uso cotidiano. (Araoz, 2010, pág. 5)


Lo anterior solamente es posible para optimizar las competencias sociales como lo son las laborales con su respectiva demanda interna y eso se logra si Colombia asume la inclusión social como un propósito nacional con políticas de largo plazo e instrumentos que de verdad generen esa inclusión esperada (Araoz, 2010).


Inclusión económica


La economía solidaria es una alternativa frente a la salida de la exclusión por parte del capitalismo neoliberal y la globalización económica, de tal manera poder contribuir en la búsqueda de oportunidades para que las personas luchen para poder vivir de otra manera (Orellana, 2007). La economía solidaria, según Orellana (2007), es


otra forma de hacer economía, o de la intención de buscar un cambio estructural a nivel global, está la necesidad real de muchas personas, comunidades y pueblos, que a nivel local han imaginado medios colectivos que les permiten “arreglárselas” para primero, sobrevivir a la marginalidad, y luego para intentar mejorar sus condiciones de vida. (pág. 8)


Desde la perspectiva de la economía solidaria, la economía es “donde se favorece la cooperación sobre la competencia, tanto dentro, como fuera de las organizaciones. De manera que garantizar la inclusión de toda la comunidad en las actividades y en el reparto de los recursos y sus frutos” (Orellana, 2007, pág. 11).


Inclusión política


La participación política indígena aspira a fortalecer sus organizaciones y a tener un rol más activo en la construcción de la democracia y de estados de carácter multiétnicos, pluriculturales y multilingüe. (Ruiz, 2003, pág. 3)


Ruiz (2003) afirma que:


El desarrollo indígena es desarrollo autónomo. En la visión de los pueblos indígenas implica la existencia y el reconocimiento de la capacidad de los pueblos para decidir sobre su sistema organizativo interno, la gestión propia de su desarrollo económico, social, cultural, y la conservación de un grado razonable de competencia para autorregularse. (pág. 20)


La participación política indígena actualmente está fortaleciendo sus organizaciones en busca de tener un rol más activo en la construcción de la democracia y de estados de carácter multiétnicos, pluriculturales y multilingües. El nuevo escenario político de las comunidades indígenas se muestra gracias a sus antepasados por medio de la lucha, de movilizaciones de protesta, y diálogos con el gobierno referente a sus derechos humanos, se han ganado un espacio dentro de la política de Colombia. Pero a pesar de ello se sigue presentando circunstancias ajenas que impiden que los indígenas alcancen los objetivos y metas teniendo un esfuerzo más que cualquier persona Mestiza en Colombia (Ruiz, 2003).


Interculturalidad


Walsh (1998) define la interculturalidad como


un proceso de relación, comunicación y aprendizaje entre personas, grupos, conocimientos, valores y tradiciones distintas, enfocado en generar, construir y propiciar un respeto mutuo y un desarrollo plenos de las capacidades de los individuos, a pesar de sus diferencias culturales, sociales y de género. Es un proceso que intenta romper con la historia hegemónica de una cultura dominante y otra subordinada, así como reforzar las identidades tradicionalmente excluidas, y construir una convivencia de respeto y de legitimidad mutua. La base de la interculturalidad es la identidad, la identidad individual, y los diversos grupos socioculturales y de la sociedad. (pág.1)


Sumado a lo anteriormente mencionado, de acuerdo con la búsqueda científica de los procesos de interculturalidad sobre los indígenas Ingas del Valle del Sibundoy, se evidenció que tienen una relación cultural y viven compartiendo un mismo territorio en paz y armonía con la comunidad Kamëntsa, respetando sus derechos, creencias y cultura desde su cosmovisión, siendo la interculturalidad definida, según Moya (2009), como


aquella que va más allá de las relaciones entre culturas. Supone el reconocimiento del “otro” y la afirmación de sí mismo. Este tipo de reflexión ha aportado a las concepciones de educación intercultural ya que postulan que una de las primeras obligaciones o tareas de un pueblo es la de “ser” y para “ser” es preciso apelar a los elementos cohesionadores que vienen de la historia común, de las relaciones del entorno, la cosmovisión, los valores, el idioma, entre otros, los cuales deben ser valorados y desarrollados para romper con la opresión; también está la similitud de problemas derivados de la explotación, la exclusión, la marginación económica y social. (pág. 29)


Comunidad indígena Inga


La comunidad indígena Inga se encuentra ubicada en el alto del departamento de Putumayo, exactamente en el Valle de Sibundoy el cual comprende cuatro municipios: San Francisco, Sibundoy, Colón y Santiago; esta comunidad se encuentra a tres horas del casco urbano del municipio de Mocoa, en la zona rural por carretera destapada. La mayor concentración de la población indígena Inga del valle se encuentra en los municipios de Colón y Santiago, siendo este un hermoso territorio donde conviven los Ingas, Kantsa y mestizos.


Para llegar al valle, se llega al municipio de Mocoa capital del departamento de Putumayo y luego se aborda un transporte público el cual transita por una vía de difícil acceso debido al terreno agrete; pero esto no es una barrera para ir al valle del Sibundoy, la recompensa a este arduo viaje es el paisaje, su fauna y flora.


Para poder ingresar a la comunidad indígena Inga se deben tener unos permisos previos y realizar un viaje exclusivamente para la presentación, no se puede por medio telefónico o virtual, la palabra y la visita en persona es grata para sus mayores y pueblo en general.


Los Ingas mantienen un fuerte proceso organizativo, que les ha permitido generar una importante incidencia social y política en la región e incluso en las zonas urbanas en donde se han asentado. Su tradición viajera y comerciante ha sido un importante factor de visibilización y reconocimiento a su cultura, particularmente en relación a la producción de artesanías y remedios a base de plantas para el tratamiento de una gran variedad de patologías. La difusión del uso de yagé en las ciudades con población no indígena se ha convertido en una de las herramientas de visibilización y reconocimiento de mayor impacto, pues propicia espacios de encuentro, diálogo intercultural y aprendizaje, además de la difusión de no solo la cultura Ingana, sino la indígena en general. (Ministerio de Cultura, 2014, pág. 10)


Resultados


El texto interpretativo que se presenta a continuación surgió del proceso de análisis de los relatos de los indígenas Ingas ubicados en Colón de Putumayo y de la herramienta de diario de campo. Para este proceso se tomaron los relatos que hacían alusión referente a la inclusión desde el punto de vista político, cultural, social y económico. Destacando: buen vivir - Suma Kiusai, territorio, la política desde la integración y no inclusión, los elementos simbólicos, Chagra, generar tejido y compartir alimentos.


Como se puede evidenciar el buen vivir – Suma Kiusai atraviesa la lógica de los 4 ejes, siendo un elemento central por el cual la comunidad Inga, da a conocer y enseña al mestizo como a partir de ello radica toda una lógica de pensamiento que viene tras generaciones, y es por ello la importancia de mantenerse en el junto con los otros principios (Suma Rimai – hablar bonito, Suma yachai – buen saber, Suma llullai- buen pensar, Suma quillai – no seas perezoso, Suma sisay- no robes, Suma yuyaino mientas-). Si se maneja y se respeta este principio, el proceso de inclusión o como ellos hacen referencia el “compartir” será más fructífero entre un mestizo y un indígena Inga. Lo anteriormente mencionado se enmarca desde la lógica del territorio como elemento integrador. Se toma este como un eje central donde sostiene sus raíces, en el cual permanecen sus antepasados, aquel elemento que le provee el alimento, lugar donde se establece el techo y así formar familia. Es por ello, que aparece un primer elemento simbólico, que es la chagra; siendo este un lugar sagrado donde se entrecruzan las raíces de los diferentes vegetales, frutos, arboles, enredaderas, y así les suministra lo necesario para bastecerse día a día con lo justo, la participación en la chagra es el segundo vinculo de inclusión que realiza la comunidad Inga mediante sus actividades diarias, costumbres culturales dentro de su trabajo. Cualquier persona no entra a la chagra de un hogar Inga, debe tener buenas energías e intenciones puesto que sus ancestros quienes vigilan el territorio se manifestarán. Un factor simbólico pero elemental, como muestra de inclusión cultural y económica hacia el mestizo es el ingreso, participación con la chagra e intercambio de trabajo por alimento, puesto que se parte del ideal que toda persona puede aportar a la comunidad desde sus habilidades.


Actualmente se encuentran en el rescate de la chagra puesto que la inmersión del monocultivo causado por occidentales ha hecho que su territorio se vea afectado al igual que su lengua, y su cultura. Por esta razón, a nivel político son tan cerrados en ingresar un mestizo, sumado a toda una historia de humillación, despojos, injusticias que tras generaciones recuerdan y que día a día luchan para el rescate de sus derechos como cultura indígena. Es por ello por lo que el mestizo es integrado para que observe, pero en ningún momento para votar, opinar y mucho menos tomar una decisión a nivel político, solo se da una integración y no inclusión en la participación política de su comunidad a los dos mestizos. Es por lo anterior que el valor de la palabra e ingreso a la comunidad debe tener una serie de permisos donde el mestizo vaya consiente y representado por una familia Inga, que no afecta rá el entorno ni la comunidad donde permanecerá.


Estos procesos de poder hacen parte desde el ingreso a la comunidad de los dos mestizos. Previamente se debe tener un permiso por parte de familia donde inicialmente el mestizo va a llegar, para que ellos mismos los dirijan donde el alcalde mayor y el gobernador que en ese momento estén a cargo. En la participación política la palabra tiene un gran valor, el hecho de estar referenciado por algún Inga que conozca al mestizo que se incluirá a la comunidad. La organización política va de la mano con los “procesos de poder” ya que hay un orden jerárquico de poder, siendo tradicionalistas, manejan los procesos de poder de sus antepasados; el taita, juega un papel esencial dentro de la comunidad y está directamente relacionado su opinión acerca del mestizo con el alcance de la inclusión y participación en los dique hay un orden jerárquico de poder, siendo tradicionalistas, manejan los procesos de poder de sus antepasados; el taita, juega un papel esencial dentro de la comunidad y está directamente relacionado su opinión acerca del mestizo con el alcance de la inclusión y participación en los dique hay un orden jerárquico de poder, siendo tradicionalistas, manejan los procesos de poder de sus antepasados; el taita, juega un papel esencial dentro de la comunidad y está directamente relacionado su opinión acerca del mestizo con el alcance de la inclusión y participación en los diferentes escenarios que se da dentro de la comunidad. Con lo anteriormente enunciado, la inclusión de la comunidad Inga a dos mestizos está enmarcada desde aquellos procesos de aceptación respetando aquellos elementos integradores jerárquicos que sin ellos no habría una inclusión representada por unas bases políticas propias de cada sociedad conformada.


Por otra parte, se hace oportuno mencionar que se rescata el hecho de que rigen bajo una terminología importante para ellos que es el “generar tejido”: el hecho de entrecruzar unos hilos donde cada uno de ellos es de una persona distinta, una mezcla de indígenas, mestizos y cualquier persona que quiera hacer parte; tendrá como resultado una red tejida sólida, fuerte, compartida, construida entre todos, con el compartir recíproco del conocimiento; en pro de un beneficio por la comunidad, del territorio o del mismo país en general.


Es por ello por lo que para la comunidad Inga, al incluir a los dos mestizos va inmerso en un compartir donde se genere un tejido que cree cambios positivos, estando como base el respeto, la ayuda, la solidaridad, el perdón, que se genera poco a poco con la comunidad, y con la familia que recibe como ellos hacen referencia al “Colono”. La familia como eje principal, conformada por papá, mamá e hijos, donde se forjan con el ideal de la ayuda al otro, de liderar, de aportar a la comunidad, donde es el padre o en la mayoría de los casos el Taita, el que toma las decisiones en compañía de su esposa, puesto que tras años de lucha y liderazgo ellas ya tienen un rol significativo dentro de la organización política y familiar Inga, y es a partir de este equipo (papá y mamá) que mantiene unida y participativa a la familia. Es por ello por lo que acogen al mestizo y le enseñan desde un principio el tercer simbolismo que es el compartir de los alimentos, porque es alrededor de una cocina, de un comedor, donde se realiza el encuentro perfecto para escuchar a los mayores, resolver dudas, reír, y disfrutar de aquello que la tierra le previo para alimentarse de manera sana y armónica con lo espiritual que ello representa.


Hay una constante de inclusión en las actividades que se realizan en casa. Para que la lógica del compartir, especialmente el compartir de conocimientos que le dieron a los mestizos fuese recíproco, la comunidad Inga están abiertos a aquellas enseñanzas, historias, costumbres que también las otras personas que no son parte de los Ingas quieran dar a conocer. Esto lleva a pensar a un factor muy importante de la inclusión y es que ésta debe ser de parte y parte, manteniéndose el respeto y la receptividad acerca de aquello que el otro desconoce y que quizás pueda usar para un beneficio tanto personal como para la comunidad.


Aproximación teórica


Se evidencia una aproximación teórica de los expertos que fortalecen el planteamiento del Buen vivir - Suma Kiusai, territorio, la política desde la integración y no inclusión y los elementos simbólicos tales como; Chagra, generar tejido y compartir alimentos.


El buen vivir visto desde un principio de vida que tras generaciones han trascendido fortaleciendo su sano convivir, y estado de bienestar desde la comunidad.


La importancia dada a la diversidad cultural como nueva forma de convivencia pacífica y como espacio garante de los derechos culturales, la aparente contribución de aquella hacia la cohesión, la integración y la inclusión social por vía de la participación comunitaria, constituyen algunos de esos preceptos fuertemente valorizados a la hora de pensar la cultura como una dimensión inexorable en el camino hacia el desarrollo sostenible de diferentes grupos sociales. (Lacarrieu, 2006, pág. 1)


La cultura en la comunidad Inga es tan fuertemente constituida que en parte es gracias a sus políticas, es por ello los dos mestizos a nivel político fueron integrados y no incluidos partiendo de la afirmación de Ruiz (2003):


El desarrollo indígena es desarrollo autónomo. En la visión de los pueblos indígenas implica la existencia y el reconocimiento de la capacidad de los pueblos para decidir sobre su sistema organizativo interno, la gestión propia de su desarrollo económico, social y cultural, y la conservación de un grado razonable de competencia para autorregularse. (pág. 20)


Añade a lo anterior, que la participación política indígena actualmente está fortaleciendo sus organizaciones en busca de tener un rol más activo en la construcción de la democracia y de estados de carácter multiétnicos, pluriculturales y multilingüe. El nuevo escenario político de las comunidades indígenas se muestra gracias a sus antepasados por medio de la lucha, de movilizaciones, de protesta, y diálogos con el gobierno referente a los derechos humanos, se han ganado un espacio dentro de la política de Colombia. Pero a pesar de ello, se sigue presentando circunstancias ajenas que impiden que los indígenas alcancen los objetivos y metas teniendo un esfuerzo más que cualquier persona mestiza en Colombia (Ruiz,2003). Y García (2005) fortalece lo anterior afirmando que


la consecuencia política de esta definición fue el relativismo cultural: admitir que cada cultura tiene derecho a darse sus propias formas de organización y de estilos de vida, aun cuando incluyan aspectos que pueden ser sorprendentes, como los sacrificios humanos o la poligamia. (pág.31)


Por otra parte, encontramos a nivel simbólico la chagra, como elemento cultural de inclusión Inga para el fortaleciendo a la misma desde su defensa al territorio como hace referencia Ardila (2006):


El concepto de territorio no es un concepto simple, no sólo por su importancia en la vida cotidiana de los seres humanos, sino por la multiplicidad de usos y significados que le hemos conferido a raíz de su reconocimiento como uno de los conceptos básicos de la vida humana. Una definición del concepto de territorialidad nos obliga a superar la idea de que el territorio es un espacio de tierra sobre el cual se desenvuelve — sin más— la vida humana, así como la idea de que el territorio es tan sólo la organización político-administrativa que se derivó de la aparición del Estado-nación […] Cada momento de nuestra existencia requiere de un despliegue de conocimientos acerca de la territorialidad, de nuestra idea de territorialidad, la cual incluye las dimensiones materiales (los paisajes) y simbólicas (sus significados) a partir de las cuales construimos nuestro sentido de relación espacial y temporal. En otras palabras, el territorio no es tan sólo nuestra ubicación espacial, es también nuestro referente de ubicación social y, por tanto, el referente para nuestro comportamiento en la relación con los demás, en cada instante de nuestra vida. (pág. 14)


A partir del territorio, por medio de la chagra donde emerge la inclusión y también el intercambio de trabajo y participación en la familia Inga. Para ello, Marx (citado por Erice Sebares, 2013) llega a la conclusión de que el único elemento común a todas las mercancías, que permite su mutuo intercambio. Los productos que se intercambian como mercancías llevan incorporada una cierta cantidad de trabajo, y es esa cantidad la que determina su valor. Esta es la base argumental de la teoría del valor-trabajo.


Desde la perspectiva de la economía solidaria, la economía es: “donde se favorece la cooperación sobre la competencia, tanto dentro, como fuera de las organizaciones. De manera que garantizar la inclusión de toda la comunidad en las actividades y en el reparto de los recursos y sus frutos” (Orellana, 2007, pág. 11).


Ahora es importante sumado a lo anterior mencionar el segundo elemento simbólico “generar tejido” según Téllez (2010) el tejido social, los vínculos y la cotidianidad los define como “potencialidades para el fortalecimiento de desarrollo comunitario… tejido social y los vínculos que se expresan en lo cotidiano, lo que construye proyectos comunes con capacidad de producir espacios vitales con perspectivas colectivas y formas creativas de vivir en comunidad” (pág. 14). Por ello, Téllez (2010) reafirma:


Es preciso entonces volver de manera permanente a relaciones humanas donde se reconozca la intersubjetividad como aspecto que enriquece el tejido social; se requiere volver a valorar en todos los espacios de relacionamiento los entramados de apoyo, solidaridades y la búsqueda de unos y otros, en el reconocimiento de lo que somos y deseamos. Los seres humanos construimos formas de relacionarnos y de vivir, somos constructores y portadores de cultura, por eso es posible juntar las potencialidades generadoras de vida y rescatar nuestra identidad humana capaz de originar forman nuevas del convivir en comunidad, haciendo una cultura del convivir. (pág. 8)
Se enriquece la mirada sobre los valores y las formas de vida, facilitando nuevas formas de participación y solidaridad, y fortaleciendo los lazos se aporta al tejido social en tanto somos sujetos sociales, con capacidad de tejer nuevas historias y territorialidades como prácticas colectivas, conciencia social y ecológica donde se pueda ser responsable con la comunidad. (Téllez, 2010, pág. 9)


Finalmente, el tercer elemento simbólico el “compartir alimentos” como espacio de fortalecimiento de la persona y la convivencia. Según Téllez (2010) la convivencia:


También involucra el manejo y apropiación de los espacios físicos y simbólicos para dar lugar a las distintas ideas de sociedad. Es en el territorio donde hoy día se propone la construcción del tejido social y por eso ha de entenderse como un sistema dinámico y cambiante que acepta y admite que cada sujeto puede construir múltiples redes facilitadoras del tejido social y no solamente las propuestas por la vía institucional, porque en la dinámica misma de las comunidades los sujetos deciden y crean formas de vivir. Las redes sociales o redes de relaciones se constituyen en la dinámica propicia para producir intersubjetividades y transformación social. En las redes pueden ocurrir desarrollos humanos que se expresan en la habilidad de las personas para construir vínculos que son sustento del mismo tejido. (pág. 11)


Conclusiones


La inclusión realizada por la comunidad indígena Inga ubicados en Colón, Putumayo, a dos mestizos se rige desde los ejes; político, social, cultural y económico, donde se enmarcan en buen vivir - Suma Kiusai, la política desde la integración y no inclusión, los elementos simbólicos; chagra, generar tejido y compartir alimentos.


A nivel político, hay un proceso organizativo establecido tras generaciones que les permite así mantener su identidad indígena controlada con el fin de no repetir historias de despojo, humillaciones y degradación de sus costumbres por parte de los occidentales, es por ello que el mestizo debe inicialmente realizar una aproximación al territorio de Colón Putumayo para los respectivos permisos de ingreso a la comunidad, donde a partir del reconocimiento de las intenciones de los mestizos dan el ingreso.


Desde el inicio ya se establecen unas condiciones que van enmarcando la inclusión política al mestizo, que finalmente por toda su estructura hace que los 2 mestizos no sean incluidos a nivel político, si no se da una integración, donde solo puede observación. Sus estándares políticos de orden jerárquico y respeto al linaje indígena no son permitidos.


Como segundo eje a nivel social se concluye que la inclusión es realizada en los dos mestizos, enmarcado en la generación del tejido social, donde se establece una red de apoyo a los mestizos para integrarlos en las diferentes dinámicas que se presentan en el diario vivir de los Ingas, y así los reconocen como seres que aportan, enriquecen la comunidad y el aprendizaje.


A nivel cultural, el mestizo es inmerso en una serie de acontecimientos que giran en torno a las familias, a sus costumbres, al respeto por su lengua, al rescate por lo propio, la continuación de las historias y enseñanzas de sus antepasados, y la piedra angular para direccionar lo dicho se centra en lo simbólico del compartir de alimentos, que la familia gire en torno de la mesa o fogón, donde todos dialogan y comparten un espacio e incluyen al mestizo para fortalecer en él el sentido de vida.


A nivel económico los Inga establece un patrón de inclusión donde todos, incluyendo a los mestizos, deben aportar a la casa o a la comunidad, por ello como ellos refieren “comparten” y enseñan el valor de trabajar la tierra y servir a la comunidad con sus conocimientos, y para este caso se realizó a través de la chagra, que atraviesa la lógica del territorio, como cuidado y símbolo de vida para dar a los seres humanos lo necesario y justo para vivir.


Considerando lo anteriormente mencionado, a nivel político, social, cultural y económico, se fundamentan en pro del Buen vivir - Suma Kiusai-, donde la inclusión en los 4 ejes es reconocida por ellos como un compartir, con el fin de que los mestizos, a través del reconocimiento y el respeto por el otro, aprendiese que, sin importar razas, etiquetas, todo ser humano, debe dirigirse hacia el buen vivir, y en ello se fundamente la verdadera inclusión Inga.


Referencias


Agencia de la ONU para los Refugiados ANUR. (2011). Comunidades indígenas en Colombia, 35. Retrieved from http://www.acnur.org/t3/fileadmin/Documentos/Pueblos_indigenas/2011/Comunidades_indigenas_en_Colombia_-_ACNUR_2011.pdf?view=1.ONU


Alvídrez, S.; Igartua, J. J.; y Martínez-Rosón, M. (2015). Schematic representations of ethnic minorities in young university students. Anales de Psicología, 31(3), 930– 940. https://doi.org/10.6018/analesps.31.3.183941


Araoz, S. (2010). Inclusión social: un propósito nacional para Colombia, 7, 1–49. Retrieved from http://www.ucentral.edu.co/images/editorial/economia/2010-12-documentos-investigacion-economia-007.pdf


Ardila, G. (2006). Cultura y Territorio - Gerardo Ardila. Retrieved from http://www.docentes.unal.edu.co/giardilac/docs/CulturayTerritorio-GerardoArdila.doc


Azuero, A. R. (2011). Capital Social e Inclusión Social: algunos elementos para la política social en Colombia. Cuadernos de Administración, (41), 151–168. Retrieved from http://www.scielo.org.co/pdf/cuadm/n41/n41a11.pdf%5Cn http://bibliotecadigital.univalle.edu.co/handle/10893/2181


Capera y Torres. (2014). http://ridum.umanizales.edu.co:8080/jspui/bitstream/6789/1907/1/tesis%20maestria%2022%20%20de%20agosto%202014%20UMZ16.pdf. Recuperado el 06 de 2015


Congreso. (1991). Constitucion politica de colombia 1991 preambulo el pueblo de colombia,108.


Erice Sebares, F. (2013). La Teoría Económica de Marx. Colección Introducción al Marxismo (Vol. 3).


García, N. (2005). Diferentes, Desigualdades y Desconectados. (S. A. Gedisa, Ed.) (primera ed). Retrieved from https://teoriasantropologicasucr.files.wordpress.com/2011/05/garcia-canclini-nestor-diferentes-desiguales-y-desconectados-mapas-de-la-interculturalidad.pdf


Hernández, R.; Fernández, C.; y Bap- tista, P. (2014). Metodología de la investigación. Journal of Chemical Information and Modeling (Vol. 53). https://doi.org/10.1017/CBO9781107415324.004


Jamioy Muchavisoy, J. N. (1997). Los saberes indigenas son patrimonio de la humanidad. Nómadas, 7, 64–72.


Lacarrieu, M. (2006). Cultura-Inclusión: reflexiones críticas acerca de una relación, 110–118.


Lloréns, J. (2006). social con orientación intercultural. Retrieved from http://revistaargumentos.iep.org.pe/wp-content/uploads/2014/01/llorens.pdf


Manrique, M.; Benjumea, S.; Rodríguez, I.; Nieto, B.; Calvo, S. F.; Botero, E. S.; y Salamanca, M. (2003). Los pueblos Indígenas en Colombia: derechos, políticas y desafíos, 1–90.


Martínez, M. (1998). La investigación cualitativa etnográfica en educación. Manual teórico-práctico.


Ministerio de Cultura. (2014). Ingas, el pueblo viajero, (18000), 13. Retrieved from http://observatorioetnicocecoin.org.co/cecoin/files/CaracterizacióndelpuebloInga.pdf


Moscol Ochoa, J. (2014). http://repositorio.ug.edu.ec/bitstream/redug/8420/1/Inclusi%C3%B3n%20Educativa.pdf. Recuperado el 06 de 2016


Moya, R. (2009). La Interculturalidad para todos en America Latina. En L. E. Lopez, Iterculturalidad, educacion y ciudadania perspestivas latinoamericas (pág. 29). La Paz: Plural editores.


Orellana, M. (2007). La Economía Solidaria Como Forma De Organi- zación Económica Alternativa Al Sistema Capitalista Global. Orellana, Maite, 28.


Pacho, Embus, Tovar y Embus. (2014). http://biblioteca.usco.edu.co/cgi-bin/koha/opac-detail.pl?biblionumber=36873.


Ruiz Murrieta, J. (2003). Democracia y participación política de los pueblos índigenas en América Látina, (67), 33.


Téllez, E. (2010). El sentido del tejido social en la construcción de comunidad. Polisemia, 10(10), 9–23. Retrieved from http://biblioteca.uniminuto.edu/ojs/index.php/POLI/article/viewFile/170/169


Walsh, C. (1998). La interculturalidad y la educación básica Ecuatoriana: Propuestas para la reforma educativa. Procesos. Revista Ecuatoriana de Historia, 1(12), 119–128.





Portada revista Paideia Surcolombiana No. 9

Año: 2001

Fuente: Revisa Paideia Surcolombiana