Encuentro internacional de neurociencias y neuropsicología, usco, octubre 9,10 y 11 de 2008
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Desde hace mucho tiempo, el ser humano ha sido objeto de estudio por parte de las diferentes disciplinas académicas y ha sido abordado desde diferentes perspectivas, como la espiritual, la fisiológica, la comportamental, la filosófica, la lingüística, la antropológica, la cognitiva, la biológica, entre otras tantas. En nuestros tiempos, observamos que un órgano fundamental de estudio del ser humano es el CEREBRO; de allí que se desprenda toda una serie de dicotomías que inevitablemente involucran la conducta humana, entre las que podemos citar la actitud de agresividad y de pasividad, el amor y el odio, el bien y el mal, el ansia y el desinterés frente a algo o alguien, la luz y la oscuridad del pensamiento.
Insistimos, el interés de los especialistas en la mayoría de los campos científicos por el cerebro y el sistema nervioso no es algo reciente: Hipócrates, Aristóteles, Descartes, Diderot, La Mettrie, Maine de Biran, etc., hablaron mucho sobre él. No obstante, los mayores desarrollos comenzaron a manifestarse a partir de la segunda mitad del siglo XIX con los trabajos de Flourens, Broca, Wernicke, Helmholtz y sobre todo de Santiago Ramón y Cajal quien fue el primero en describir la organización cerebral y las conexiones neuronales y esto permitió que el cerebro se convirtiera no sólo en un objeto de estudio biológico sino también filosófico.